Esta semana hemos conocido un avance de los resultados de la encuesta ¿Qué sabes de las unidades de información y de los profesionales que trabajan en ellas? del grupo Pupietv SDA, que forma parte del proyecto ¿Infoxicado? Descubre al profesional de la información: bibliotecarios, archiveros y documentalistas en la era digital.
Entre muchos otros datos de interés que pueden hacernos reflexionar -sí, aún más- sobre la proyección de nuestra profesión sobre la sociedad, hemos visto, como no pilla de sorpresa a nadie, que las bibliotecas siguen siendo las unidades de información visitadas en nuestro país. Un 43% de los encuestados dice hacer uso en su día a día de ellas. Los archivos y los centros de documentación -con un 19,4 % y un 17,9% respectivamente- son las siguientes. Pero lo preocupante es que más de un 10% de la población reconoce no emplear ninguna.
Por otro lado, y mucho más perturbador aún, aunque una amplia mayoría afirma que el personal cualificado es necesario en las unidades de información (sólo un 1,7% no lo considera así) y que este tipo de servicios y sus profesionales son precisos en la era digital (frente a un 1,4 que cree que ya no tenemos cabida en esas nuevas realidades que ya están aquí) lo cierto es que el hecho de que una pregunta de ese tipo se incluya en las encuestas y haya personas, por pequeño que sea el porcentaje, que nos considere accesorios, debe hacernos encender todas las alarmas.
Ante esta situación no cabe más que preguntarse, porque tal vez así sucede y lo desconocemos, si hay otros colectivos profesionales en ejercicio y con un número tan grande de personas implicadas –vamos a dejar de lado profesiones que suponemos están obsoletas o son claramente minoritarias, verbigracia, catavenenos o emperadores- a los que en sus encuestas sobre su profesión se les pregunte si se consideran útiles en estos tiempos. Parece que profesional de la información tiene que estar permanentemente defendiendo su papel, y nos preguntamos por qué eso no parece ser extensible a otros colectivos tan variados como docentes, veterinarios, o ingenieros. ¿No dicen que está todo en la red? Pues no pasa nada, ya nos buscaremos un tutorial de cómo hacer una casa. Dejando de lado las hipérboles -o no- seguimos constatando que no podemos bajar la guardia.
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